Italia debe estar preocupada con la situación que están viviendo en los últimos días. Este jueves, las autoridades italianas, han vuelto a detener a un inmigrante por violar a una mujer.
En esta ocasión se trata de un marroquí de 34 años, quien violó a una mujer en Rímini, una de las zonas más turísticas de Italia.
Según informan las agencias italianas, los carabinieri detuvieron al marroquí de 34 años cuando este se aprovechó de que una mujer estaba bajo los efectos del alcohol para violarla en la playa.
El atacante habría cogido el móvil a la mujer, obligándola a seguirlo hasta la playa para recuperar su teléfono. Una vez en la playa, el marroquí trató de violarla, pero su pareja, logró llamar al 112 avisando a la policía, que se personó en el lugar, encontrándose al marroquí desnudo mientras trataba de abusar sexualmente de la mujer.
Hay que recordar, que hace seis días, un grupo de cuatro inmigrantes africanos violaron a una joven polaca después de apalizar a su novio, dejándole inconsciente. La capital del turismo italiana se encuentra en estado de ‘shock’ tras estos ataques sexuales.
Pero…¿Cuando se le van a abrir los ojos a las autoridades europeas y tomarán las medidas duras que corresponden para acabar con esta lacra que han permitido que entre sin control en Europa al amparo del papanatismo y el buenismo? La primera medida, detención y castigo duro, no vacaciones carcelarias y después tras años de condena dura, expulsión inmediata. Y para el resto, o adopción de nuestras costumbres y nuestra cultura o irse a hacer puñetas a su país o a otros de la misma calaña. BASTA YA!
WELCOME REFUGES!