Viktor Orbán, presidente de Hungría, se encuentra en plena campaña electoral para repetir presidencia ganando las próximas elecciones.
En un acto electoral al que acudieron decenas de miles de personas, Viktor Orbán no dudó en asegurar que Europa se enfrenta a un gran problema «si no comienza a cerrar sus fronteras».
«Europa espera que entreguemos voluntariamente nuestro país a extranjeros de otros continentes que no hablan nuestro idioma, que no respetan nuestra cultura, leyes ni forma de vida», avisó Viktor Orbán.
«Europa entera se enfrenta a una ola de inmigración masiva que pone en peligro nuestra forma de vida. Europa está siendo invadida y aquellos países que no cierren sus fronteras e impidan la entrada masiva de inmigrantes, estarán perdidos», insistió Orbán.
Con la mirada puesta en las elecciones del 8 de octubre, Orbán defendió: «Esta es nuestra casa, nuestra vida está en este país, no tenemos ningún otro. Tenemos que luchar por él hasta el final».
Por último Viktor Orbán quiso mandar un mensaje de aviso a occidente: «Nosotros seguiremos vivos mientras vemos cómo países como Alemania, Suecia o Francia pierden sus costumbres. Todos los ciudadanos nativos de esos países serán minoría y perderán su único lugar al que pueden llamar casa».
Cierto, España debería cerrar su frontera y expulsar a los ilegales que tiene, mal vamos…
Cuando hungría cierre su museo del holocuento, me la tomaré en serio.