Oriol Junqueras seguirá durmiendo entre rejas. El ex vicepresident de la Generalitat, que declaró este jueves ante un tribunal formado por tres jueces del Tribunal Supremo, no ha sido puesto en libertad pese a insistir en su declaración que abandonaba la vía unilateral de la independencia de Cataluña y que su principal objetivo era negociar con el Estado español.
Ayer, el propio Gabriel Rufián, diputado de ERC, reconocía que era complicado que Junqueras fuera puesto en libertad: «Todo parece indicar que Junqueras seguirá en prisión. Lo sabemos por la prensa madrileña».
Oriol Junqueras llegó a los calabozos de la Audiencia Nacional a primera hora de la mañana del jueves, siendo trasladado al Tribunal Supremo sobre las diez y media. El ex vicepresident del Govern pidió al Supremo que le dejara en libertad para «ejercer la representación política como presidente del Gobierno», pero los jueces que escucharon sus palabras, han decidido este viernes mantener la línea de Pablo Llarena, y le denegaron su libertad, ratificando la prisión provisional.
Miguel Colmenero, Alberto Jorge Barreiro y Francisco Monterde reanudaron este viernes la deliberación, decidiendo por unanimidad que Junqueras debe seguir entre rejas.
Según el auto, Junqueras puede encuadrarse en los delitos de rebelión, sedición y malversación, un hecho «gravísimo» en un Estado de Derecho como es España. Eso sí, indica que no consta que haya participado o ejecutado personalmente actos violentos.
De poco sirvieron las palabras del líder de ERC asegurando ser un «hombre de paz, creyente y que busca el diálogo».
Podrá ser investido president de la Generalitat
Pese a que seguirá en la cárcel, Oriol Junqueras podría ser investido president de la Generalitat, algo que JuntsxCAT quiere evitar, puesto que desde la formación independentista consideran que Carles Puigdemont es el único president de la Generalitat.