Suecia ha hablado y ha decidido seguir defendiendo a los partidos que no están por la labor de poner fin a la llegada masiva de inmigrantes ilegales en el país nórdico, aunque el partido antiinmigración y antiislam, SD, ha conseguido el mejor resultado de su historia.
La formación política de Jimmie Akesson subió casi un cinco por ciento respecto a las últimas elecciones, confirmándose que hay un alto porcentaje de suecos hartos de la presencia masiva de inmigrantes ilegales, aunque no los suficientes como para poner fin a la actual situación que vive el país.
Pese a los resultados, decepcionantes más para los ciudadanos fuera de Suecia que confiaban en un giro radical en la política del país nórdico respecto a los inmigrantes, Jimmie Akesson se ha mostrado satisfecho, asegurando que están preparados para seguir creciendo: «Queda mucho por hacer. Contamos con el apoyo de cientos de miles de ciudadanos suecos y eso nos ayudará a seguir trabajando por ellos y por toda Suecia. Seguiremos creciendo«.
Por su parte, Stefan Löfven, pese a que todo hacía indicar que sufriría una duda caída, solamente se dejó un 3% de los votos respecto a las últimas elecciones, obteniendo más del 28,3% de los votos.