El racismo y xenofobia de Sabino Arana, fundador de PNV, ha salido de nuevo a la luz gracias a VOX.
Iván Espinosa, portavoz de VOX, fue el primero en recordar en el debate electoral de TVE que el fundador del Partido Nacionalista Vasco era un tipo lleno de odio, racista, xenófobo y etnicista, que incluso despreciaba a las mujeres.
Esta dosis de realidad ha indignado al PNV, que en las últimas horas ha tratado de atacar a VOX acusándolo de ser un partido franquista, un ataque que de poco sirve, puesto que las encuestas dan hasta 46 escaños al partido de Santiago Abascal.
Las citas de Sabino Arana, que aparecieron en periódicos y revistas como Bizkaitarra, Baserritarra y La Patria, muestran su verdadero pensamiento que el PNV trata de ocultar a toda costa.
Así de racista, xenófobo y machista era Sabino Arana
El bizkaino es de andar apuesto y varonil; el español o no sabe andar, o si es apuesto, es tipo femenino.
Es preciso aislarnos de los maketos. De otro modo, aquí en esta tierra que pisamos, no es posible trabajar por la gloria de Dios.
Conste que desde luego que de ese roce del maketo con el bizkaino solo brotan en este país irreligiosidad e inmoralidad. Eso lo demuestran los hechos y se explica perfectamente.
Nosotros odiamos a España con nuestra alma, mientras tenga oprimida a nuestra Patria con las cadenas de la esclavitud. No hay odio que sea proporcionado a la enorme injusticia que con nosotros ha consumado el hijo del romano. No hay odio con que puedan pagarse los innumerables daños que nos causan los largos años de dominación.
Nosotros a ningún maketo, a ningún españolista odiamos tanto como al español o españolista que, conociendo de alguna manera la historia de Bizkaya, se la da falseada, adulterada y españolizada al pueblo bizkaino, para servirse de él en provecho de algún partido español.
Cuándo llegaran todos los bizkainos a mirar como enemigos suyos a todos los que les hermanan con los que son extranjeros y enemigos naturales suyos!
Etnográficamente hay diferencia entre ser español y ser euskeriano, la raza euskeriana es sustancialmente distinta a la raza española.
¡Ya lo sabéis, Euzkeldunes, para amar el Euzkera tenéis que odiar a España!
Que el obrero catalán se lance en brazos del socialismo o del anarquismo, no puede sorprendernos. Pero que los jóvenes vascos busquen en las promesas de gente invasora…
La mujer, pues, es vana, es superficial, es egoísta, tiene en sumo grado todas las debilidades propias de la naturaleza humana: por eso fue ella la que primeramente cayó. Pero por eso precisamente de ser inferior en cabeza y en corazón.
Nosotros odiamos a España con nuestra alma, mientras tenga oprimida a nuestra Patria con las cadenas de la esclavitud. No hay odio que sea proporcionado a la enorme injusticia que con nosotros ha consumado el hijo del romano. No hay odio con que puedan pagarse los innumerables daños que nos causan los largos años de dominación.
