Ha sido este viernes al mediodía cuando se ha presentado en el Tribunal Supremo la querella contra Pablo Llarena por prevaricación, una querella que ha sido promovida por ‘Querellants per la república‘ y que ha conseguido suma 3.418 denunciantes.
Un día después de que se conociera que el tribunal alemán solamente aceptaba la extradición de Carles Puigdemont por un delito de malversación, los independentistas se han querellado contra Pablo Llarena y los tres magistrados de la sala de apelaciones del Tribunal Supremo por la «vulneración de los derechos fundamentales como el sufragio activo y derecho de representación política de los electorales de Cataluña, por un delito de prevaricación».
Desde la asociación independentista ‘Querellants per la república’, han asegurado que «estas resoluciones son injustas porque no tienen una base jurídica en la que apoyar la denegación que se hace de su participación en la investidura».
Pero al magistrado Pablo Llarena y al resto de jueces contra los que se han querellado, tienen claro que «están haciendo lo correcto».
Fuentes internas del Tribunal Supremo asegura que la labor de Llarena y sus compañeros no va a verse modificada por la querella, la cual consideran «innecesaria»: «Los magistrados han sido informados de la querella pero no les importa. Están concentrados en poder juzgar a todos los procesados».
El magistrado Pablo Llarena ha demostrado querer juzgar con las penas máximas a todos los procesados. Tras conocer la decisión del tribunal alemán, el juez del TS decidió que no iba a aceptar la extreadición de Puigdemont por un simple delito de malversación.
