Pero desde el inicio de la gala, ya se apreció que iba a ser lenta, desorganizada y sobre todo, muy pesada para los espectadores y para los propios artistas, que en más de una ocasión sonrieron forzadamente antes los chistes sin gracia de los presentadores.
«Os juro que como profesional que soy del medio me estoy tragando esta soberana mierda para estar informado sobre los premios, ganadores, detalles de películas y demás, pero el ambiente que rodea la gala es bochornoso y me da vergüenza ajena.(feminismo,humor absurdo de calzador,escenario lamentable…)», decía uno de los numerosos periodistas que cubrió la gala.
Pero no solamente fallaron los presentadores. Asientos vacíos, gente que se levantaba, caras aburridas, y una realización deficiente, tampoco ayudaron a que el espectador pudiera disfrutar de la ceremonia.
Mucho feminismo pero poco entretenimiento
La gala estuvo marcada por las reivindicaciones de los artistas exigiendo más mujeres en la industria del cine. Penélope Cruz, Isabel Coixet y Carla Simón fueron algunas de las que posaron con el abanico rojo en el que se podía leer #MásMujeres.
La actriz española más internacional, no dudó en defender el feminismo sobre la alfombra roja: «Yo confío en que este año con todo lo que está pasando en el mundo entero llegue un cambio real». «La mujer que diga que nunca ha sentido discriminación miente», añadió.
Numerosas críticas en las redes sociales
La gala de los Goya fue el tema más comentado durante la noche. Pocos fueron los comentarios que aplaudían lo que estaba ocurriendo durante la ceremonia: «Menudo bodrio. Cada año va a peor», decían.
«Hacer bromas de Perales con un móvil con la bandera de España. Además de no tener ni puñetera gracia, ¿esta gente ha escuchado alguna vez la discografía de Perales? Humor de asnos y para asnos, prejuicios y progresía ridícula y analfabeta», fue otro de los comentarios más críticos.
Aparte del coñazo que son los goya, siempre iguales de aburridos y planos.
— Borja (@BorjaGB_Atm) 3 de febrero de 2018
Creo que tanta y tanta reivindicación ya aburre, igualdad sí, en todo sí, pero vamos que entre eso y el coñazo que es siempre lo mismo...
Con la lentitud en la ceremonia de los Goya se reafirma mi odio por los españoles: Cinco monólogos (horriblemente aburridos) y solo 10 categorías en dos horas
— Osvaldo Lizama (@elnegrolizama) 3 de febrero de 2018