Matteo Salvini vuelve a ser noticia hoy. Durante su visita a Jerusalén, y preguntado por los periodistas en referencia al atentado producido por el islamista Chérif Chekatt en Francia, ha lanzado un serio aviso a todos aquellos a favor del terrorista de Estrasburgo. El ministro de interior italiano ha prometido que arrestará a todo aquel que celebre las muertes de los inocentes que han sufrido el ataque terrorista en el mercado navideño de la ciudad francesa.
«Nuestra policía está navegando por Internet buscando a todos aquellos que celebren la muerte de otra persona«. «Se va a arrestar a todo el que se haya regocijado en Internet en las últimas horas». Han sido las palabras de Salvini.
Sin duda es un problema cada vez mayor. La libertad que redes sociales como Twitter brindan a todos aquellos que quieren dar su opinión, cada vez de manera más descarada y con menores filtros, está provocando serios problemas. Muchas veces, familiares de las víctimas están teniendo que hacer frente a burlas y risas por parte de personas que se esconden en el falso anonimato que la red parece proporcionarles, para hacer daño de forma gratuita.
El político italiano también se ha situado en contra de Hezbolá, a los que Salvini ha calificado como «terroristas».
