La dictadura independentista llega a Cataluña. En la localidad de Arenys de Munt se sancionará a las personas que retiren de la vía pública los lazos amarillos que homenajean a los golpistas, así lo ha acordado el pleno del consistorio gobernado por ERC.
«Se valorará la posibilidad de sancionar a las personas que retiren símbolos de la vía pública y de espacios privados«, se puede leer en la declaración institucional.
Joan Rabasseda, alcalde del municipio, se ha mostrado orgulloso de esta medida: «Será el primer municipio al sancionar a quien quite lazos amarillos. Plantamos cara a los limpiadores de la República Catalana».
Esta decisión de los independentistas ha sido tomada después del espectacular aumento de la participación en los Grupos de Defensa y Resistencia, más conocidos como los GDR, que en las últimas semanas, han acudido en numerosas ocasiones a retirar los lazos amarillos que se habían colocado en el municipio.
El Ayuntamiento no ha dudado en insultar a los miles de catalanes que forman los GDR, llamándolos «radicales fascistas, de derechas y franquistas«, cuya intención es buscar «la confrontación y la violencia con las personas de buena fe que se sienten violentadas por la retirada de los lazos amarillos».