La valla fronteriza de Hungría para frenar la llegada masiva de inmigrantes y refugiados es todo un éxito.
Muchas son las autoridades que han criticado duramente al país presidido por Viktor Orbán por la construcción de la valla fronteriza antiinmigración y antirefugiados, pero lo cierto, es que desde que Hungría construyó su valla, la inmigración ilegal en el país ha descendido en un 99,7%, todo un éxito que es alabado por expertos en temas migratorios.
«No hay ninguna duda de que la valla fronteriza de Hungría protege la cultura del país a la perfección. Los ciudadanos húngaros pueden estar contentos con tener esa valla», ha dicho Jacob K.
Por su parte, Csaba Domotor, secretario de Estado de Hungría, dijo recientemente: «La valla fronteriza de Hungría garantiza la seguridad de los ciudadanos y es un símbolo contra la inmigración ilegal. Protege a nuestras comunidades».
«Si no tuviéramos esa valla, decenas de miles de inmigrantes ilegales seguirían llegando hoy en día, provocando un caos que no podríamos controlar», añadió.
Hungría es junto a Polonia y la República Checa el país que más en contra está de la cuota migratoria que Bruselas ha impuesto a los diferentes países de la Unión Europea.