Rodrigo Lanza ha sido declarado culpable de homicidio imprudente de Víctor Laínez. Solamente podrá ser encarcelado a entre uno y cuatro años de prisión.
El jurado ha decidido este viernes que el antisistema, que cambió radicalmente su aspecto físico para el juicio con el fin de ofrecer una imagen engañosa al jurado, no deberá pudrirse en la cárcel después de que el jurado, tras varias horas sin ser capaz de ponerse de acuerdo, haya decidido que no sea declarado culpable de asesinato con delito de odio de por medio.
El tribunal popular no ha considerado probado que Rodrigo Lanza viera los tirantes de la bandera de España. Pese a destacar que el golpe fue por la espalda y que se ensañó con él, no lo ha declarado culpable de asesinato.
El suceso ocurrió el 8 de diciembre de 2017. Víctor Laínez estaba a las 3 de la madrugada en el bar ‘Tocadiscos’ de Zaragoza, cuando Lanza, antisistema con antecedentes penales, acompañado por otras tres personas, entró en el local y empezó a hablar con la víctima a cusa de los tirantes que llevaba.
El propietario del bar y estos testigos relataron en la vista que Laínez fue atacado por la espalda con un objeto contundente y que luego fue golpeado de forma violenta cuando estaba en suelo, con patadas y puñetazos propinados por Lanza.