Tras las declaraciones de Marta Rovira, queda claro que la Generalitat de Cataluña sigue en su empeño de hacer lo que le dé la gana.
La secretaria general de ERC, en declaraciones en RAC1, ha dejado claro que «será obligatorio» acudir a la mesa electoral en caso de ser llamados como vocal o presidente y que impondrán sanciones a aquellos que ignoren la llamada.
Pese a tratarse de un referéndum ilegal, que no cuenta con el apoyo del actual Gobierno de España ni con el de la Justicia española, Marta Rovira dice que no dudarán en sancionar a los ciudadanos que ignoren «su obligación»: «Los ciudadanos deben comprometerse con el referéndum y aquellos que no acudan a sus respectivas mesas electorales serán sancionados».
El proyecto de ley catalán sobre el referéndum recoge lo siguiente: «La mesa electoral estará formada por un presidente y dos vocales designados por sorteo público entre las personas censadas en la sección correspondiente (artículo 31.1 y 31.2). Los cargos de presidente y vocal de las mesas electorales son obligatorios (artículo 32.1)».
Parece ser que los políticos independentistas si pueden saltarse la ley para realizar un referéndum ilegal pero los ciudadanos deben ir obligados sí o sí aunque no compartan la idea de realizar un referéndum independentista unilateral.
Si me convocan a mi pienso ir a reventar la votación.y si alguno se pone tonto lo estrangulo con una estelada y y luego orino en su boca
Yo no ire si me toca es ilegal
No ire es ilegal
El ciudadano puede argüir que “el artículo 20 apartado 7 del Código Penal establece que está exento de responsabilidad criminal el que obre en cumplimiento de un deber o en el ejercicio legítimo de un derecho, oficio o cargo”.
A partir de ahí, considerando que “la convocatoria del referéndum no respeta las garantías legales ni estatutarias previstas en la normativa de carácter internacional, estatal y autonómico, es mi intención ejercer el derecho de objeción de conciencia frente al referéndum de autodeterminación, negándome, mediante la presente comunicación, a participar en la constitución de la mesa electoral.