Feministas radicales empujan e insultan a estudiantes que estaban haciendo un examen en la Universidad Complutense

Nuevas agresiones por parte de las feministas más radicales. A través de Twitter, una estudiante de la Universidad Complutense de Madrid denunciaba a primera hora de la mañana la agresión a varias compañeras y profesoras por querer acceder a las clases, y a lo largo de la mañana, la tensión no ha ido a menos, sino todo lo contrario.

Los piquetes feministas más radicales, trataron de entrar en varias aulas para interrumpir las clases e impedir que aquellos que querían dar clase e incluso tenían exámenes, no pudieran seguir con sus obligaciones.

En una de esas aulas, los alumnos que estaban en su interior, tanto hombres como mujeres, trataron de impedir que el piquete radical entrara en la clase, viviéndose momentos de tensión y agresiones e insultos por parte de las feministas.

«¿¡Pero qué estáis haciendo?! Reivindicamos igualdad, NO violencia. Esto está pasando en la Computense ahora mismo», denunciaba a través de Twitter Almudena Calvo, la joven que ha subido el vídeo a la red social.

Además, en la Universidad Complutense, se vieron pintadas agresivas, en las que amenazaban de muerte a «los machos» y llamaban a «la purga de hombres».

Queda claro que su concepto de igualdad y respeto tiene una similitud al fascismo.

Maribel M.
Graduada en Historia. Comunicadora, apasionada de la actualidad. Contacto: redaccion@casoaislado.com

2 COMENTARIOS

  1. Cuando el violento es el hombre entonces es machismo y hay que llevarlo a la cárcel sin presunción de inocencia. Cuando las violentas son estas perras entonces son caricias, está bien y hay que darles palmaditas en la espalda y premios de todo tipo, empezando por los políticos.

    Antes era la lucha de clases, ahora el marxismo se ha reinventado en la lucha de sexos. Bien, pues habrá que luchar, ¿no? Hay que volver al modelo tradicional con todas sus consecuencias, la alternativa es el infierno en la tierra.

  2. Bien. Esto, de ser cierto, confirma la opinión de que cada persona, ciudadano, debe pagar de su bolsillo, su iglesia, asociación.
    Por cierto, después de leer varias leyes escritas en idioma no sexista, o lenguaje inclusivo, es una forma perfecta de desanimar a la lectura.
    Las leyes son áridas de leer, el lenguaje inclusivo, lo complica mucho más.
    No soluciona nada, hay más de 2.000 millones de seres humanos que no pueden acceder al agua potable, y, a esta gente les da igual lo del idioma no sexista.

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