El canciller de Austria, Sebastian Kurz, no tiene la más mínima intención de apoyar los rescates de inmigrantes ilegales en el Mediterráneo.
En los últimos meses, Austria ha desarrollado diferentes medidas para posicionarse tanto en contra de la inmigración ilegal como de la islamización del país. Al igual que países como Italia y Hungría, Austria cree que los rescates en el Mediterráneo solamente generan un efecto llamada que provoca cientos de muertes.
En declaraciones al diario ‘Welt’, Sebastian Kurz ha mostrado su rechazo a las ONG acusadas de fomentar la inmigración ilegal: «Solamente crean falsas esperanzas. Esto provoca que miles de personas vean fácil llegar a Europa y no es así. Mientras los rescates en el Mediterráneo estén relacionados con un billete de ida para Europa, más y más personas se lanzarán al Mediterráneo».
Sebastian Kurz apuesta por una política de refugiados mucho más sólida, en la que se tenga como base proteger las fronteras exteriores de Europa y por supuesto, en la que se prohíba a ONG como Open Arms y Sea Watch navegar por el Mediterráneo con el fin de recoger inmigrantes ilegales.
Hay que recordar que la ONG catalana Open Arms ha vuelto a navegar por el Mediterráneo pese a no tener permiso para ello.
