Montse está viviendo una pesadilla que esperemos que acabe pronto. Esta mujer, trabajadora, que sigue pagando todos los meses su piso que no puede disfrutar, ha denunciado este martes la terrible situación que vive en Barcelona.
Unos okupas turcos se han quedado con su vivienda aprovechando que se fue de vacaciones a Cádiz. Al regresar, Montse se quedó con su vivienda okupada. Ahí fue cuando empezó la pesadilla.
La Justicia se ha puesto de lado de los okupas, ya que Montse tiene una orden de alejamiento de los okupas que viven en su casa, utilizando sus muebles, quedándose con todas sus pertenencias.
«Pago mis impuestos, el IBI Yo cada día me levanto llorando cuando esta gente está viviendo en mi casa gratis. Es un problema que le está destruyendo la vida a miles de españoles», explica Montse.
«Han conseguido cambiar la cerradura de mi casa. Han conseguido tener un contador suyo de agua y un contador suyo de luz. Para mí es una pesadilla», dice.
«Me han demandado por querer matar a sus hijos alegando a las empresas de desokupación que he mandado. Cosa que no es cierta obviamente. Tengo una orden de alejamiento de okupas de mi casa«, denuncia Montse.
«Estoy viviendo una pesadilla. No entiendo cómo sigo teniendo fuerzas», dice.
Preguntada por cuánto paga al mes, Montse dice: «Pago todos los meses 1.300 euros para que esta gente siga viviendo en mi casa. Es vergonzoso».
