El joven de 22 años detenido este jueves por propinar una patada a un agente de la Guardia Civil durante el 1-O, era opositor a Mosso d’Esquadra.
El joven no dudó en propinar una patada en la cabeza de un agente del instituto armado para evitar que arrestaran a un amigo suyo que estaba impidiendo la labor de los agentes.
El joven ha sido acusado de los delitos de atentado a la autoridad, resistencia, desobediencia y amenazas.
El propio arrestado, lamentó ante los agentes que su detención le iba a perjudicar en sus oposiciones para una plaza en los Mossos d’Esquadra.
«Estoy opositando para los Mossos d’Esquadra y sé que me va a perjudicar. No sé si podré entrar en el cuerpo tras lo ocurrido», dijo el propio joven a los agentes de la Guardia Civil tras ser detenido.