El Tour de Francia se ha quedado sin Peter Sagan, la gran figura del ciclismo mundial y ganador del maillot verde en los últimos cinco años de la prueba. La organización de la ronda gala decidió expulsarlo de la carrera por el codazo que propinó a Cavendish en pleno sprint a 70 kilómetros por hora.
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El sprint arrancó con un Cavendish que corrió mal y faltando cien metros, trató de remontar por las vallas, un hueco que ningún rival deja abierto nunca y Sagan no iba a ser menos.
Peter Sagan cerró la puerta, pero Cavendish, que no es un ciclista que se arrugue, chocó contra el cuerpo del campeón del mundo, quien abrió el codo sin soltarlo del manillas para cerrar del todo el paso.
En ese momento, Cavendish se fue al suelo, recibiendo el impacto de Ben Swift y John Degenkolb, quienes chocaron contra el inglés.
Sagan, que terminó segundo, fue expulsado del Tour de Francia por un comportamiento voluntariamente violento y peligroso. Pese a las disculpas del eslovaco, la organización no dudó.
«En términos de dolor, ya me he lesionado dos veces en el hombro antes y es más doloroso ahora. Eso me hace no ser muy optimista, pero no soy médico», dijo el propio Cavendish.
«Tengo una buena relación con Peter» y «quiero hablar de ello con él», añadió. «Estoy un poco molesto».