Artur Mas, que mañana se sentará en el banquillo por el juicio del 9-N, compareció en rueda de prensa junto a Joana Ortega e Irene Rigau en el Museo de Historia de Cataluña.
Sobre el juicio que tendrá lugar en el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña, comentó: «Servirá como acelerador para que más gente se convenza para subir al tren sobiranista y defender el derecho a decidir»
«No queremos ser inhabilitados porque no somos ni mártires ni héroes, sino servidores del país que estamos dispuestos a asumir nuestras responsabilidades», habló. «Nos querían de rodillas y con la cabeza baja y nos encontrarán de pie y con la mirada firme», añadió con contundencia.
«Sin los 42.000 voluntarios no se pudiera haber hecho el 9-N. Sin ellos no habría existido y sin los dos millones largos no tendríamos las querellas que tenemos», dijo Artur Mas sobre el apoyo que tienen las ideas independentistas que promueve y defendiendo a los participantes en la convocatoria.
«Estamos intentando que Cataluña, como nación, pueda elegir su futuro político. Somos una nación y pese a que España hace todo lo posible para impedir que se haga lo que quieren los catalanes, vamos a seguir adelante. Si las circunstancias son las propicias, haremos de nuevo lo que hicimos», explicó en inglés para los medios internacionales.